No les gusta dejarse ver ante las personas. Viven tranquilamente en grupos en lo profundo de las montañas.

Se dice que avistar a una pareja de Clefable dando saltitos trae felicidad al matrimonio.

Su fino oído puede percibir la caída de un alfiler a un kilómetro de distancia. Por eso prefiere vivir en las montañas, lejos del mundanal ruido.

Algunos científicos sostienen que cuando mira al cielo fijamente en las noches de luna llena es porque siente morriña.